sábado, 27 de febrero de 2016

¿Proyectos emblemáticos?

Don Daniel Palacios, su esposa Mazar y su hija Sopladora, una pequeña familia sevillana con gran poder para iluminar a todo el Ecuador. Sevilla de Oro, característico rincón azuayo, ubicado a 72 kilómetros de la ciudad de Cuenca, capital de la Provincia del Azuay.
 
El cantón Sevilla de Oro cuenta en la actualidad con las tres centrales hidroeléctricas más grandes del Ecuador; Daniel Palacios inaugurado hace 33 años. Mazar hace 6 y Sopladora que entrará en funcionamiento este 2016.
 
La instalación de las tres centrales hidroeléctricas han dado un cambio de 360° en el diario vivir de los pobladores de las comunidades del cantón sevillano. Mazar es la segunda hidroeléctrica más grande emplazada en la comunidad de San Pablo, esta obra fue construida con una inversión de $450.000.000. El presupuesto se destinó al proyecto integral, como elaboración del plan de manejo ambiental, indemnizaciones, fondo de compensación y la construcción misma del proyecto.
 
Sopladora ubicado en el sector con el mismo nombre, es la tercera hidroeléctrica que entrará en funcionamiento este 2016, la construcción de este proyecto generó 3258 plazas de empleo, el 25% mano de obra del cantón Sevilla de Oro. La puesta en marcha de las centrales hidroeléctricas han generado suficiente energía eléctrica para abastecer en parte la demanda en todo el país; pero así también, grandes impactos negativos que en la actualidad pobladores del cantón azuayo, lo viven.

LOS PERIODISTAS O LOS DUEÑOS DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

¿Quiénes direccionan los contenidos informativos?


Jaqueline tiene 25 años es Comunicadora Social de profesión, trabaja en un periódico muy reconocido en la provincia del Azuay. Cada mañana se despierta con la intención de obtener la primicia en las noticias que le toque cubrir, ¡todo puede ser posible! Es su lema. Quizá no logre entender tantos acontecimientos que a diario se dan; sin embargo, dependerá de la lectura que ella tiene del mundo, porque este precede a la lectura de la palabra; en definitiva, desde la infancia, con una buena o mala educación, existe una formación.

Para un periodista en el Ecuador o en cualquier parte del Mundo no será difícil comprender que el lenguaje y realidad se vincula dinámicamente, pero hay contextos en que los expertos en recopilar información no obtienen una información sistematizada y contrastada. Paulo Freire insiste en que los seres humanos deben relacionar la lectura académica con la real, pero no siempre sucede, no siempre los periodistas llegan a ese mundo especial como diría el mismo Freire, ingreso a ese mundo de actividad perceptiva.

Las y los periodistas trabajan cada jornada por tener una lectura, su propia lectura de lo que acontece, se relacionan con las fuentes a tal punto que van aprendiendo en el trato con ellos, tal como sucede cuando un niño aprende a leer y/o escribir, se le hace más fácil comprender reconociendo y palpando los objetos. El entorno para los comunicadores sociales no es alentador. Las críticas llueven a diario, más aún cuando hay un compromiso ético con la sociedad, y este es informar con veracidad, lo más cercano a la objetividad.